A partir de los cambios que nos ha impuesto la pandemia desde el 2020, las empresas han sido forzadas a acomodarse al confinamiento impuesto en varios países, además de que, en muchos casos, las bajas repentinas por salud y mortalidad ha dejado al descubierto las fallas en la transmisión del Know how.
Por otra parte, con la paulatina vuelta a la
normalidad, ha sobrevenido la inevitable crisis emergente de la paralización de
las actividades por un largo periodo y, con el advenimiento de la guerra, la
recuperación económica está lejos en el horizonte.
Bajo este escenario económico, y continuando
con los
movimientos sociales y el cambio ambiental, podemos identificar las
tendencias que las organizaciones deben considerar para el año 2023.
La cultura del bienestar. La incertidumbre en
la salud propia y del entorno del trabajador, además del confinamiento, han
generado un peso extra al estrés laboral que estamos enfrentando. Por ello, tanto
las empresas que han retomado el trabajo presencial como las que han adoptado
el home office, están desarrollando actividades que ayuden al manejo del
estrés, ya sea mediante talleres, seminarios, charlas, o mediante programas de
apoyo psicológico.
Inclusividad. El peso que han ganado los
movimientos LGBT+, y la adopción de políticas gubernamentales orientadas a la
equidad, le otorga mejor reputación a las organizaciones que buscan otorgar
oportunidades igualitarias a personas pertenecientes a etnias minoritarias, con
preferencias diversas o en situación de discapacidad.
La innovación. Las organizaciones están
motivando la innovación, no sólo en lo tecnológico, si no en procedimientos
administrativos, comerciales, logísticos. Se ha visto que las grandes empresas
de nuestra era han tenido el crecimiento y aceptación principalmente por la
ruptura de paradigmas que aún consideramos inalterables en las empresas.
Tecnología remota y digitalización. Los
servicios de almacenamiento en la nube, y los sistemas operables en la red ya
no son una opción, si no una necesidad. Las empresas que implementaron sistemas
ERP Cloud antes del 2019 no vieron una afectación significativa a sus
actividades durante el periodo de confinamiento, lo mismo que las empresas que
tenían sistemas de comercialización y logística en la red o aplicativos andoid
e ios.
Inteligencia artificial y dominio de la
información. El desarrollo del software empresarial cada vez permite un mayor
almacenamiento de información, el cual es una extensa fuente de conocimiento
del cliente, el entorno y la competencia y puede ser bien aprovechado con la
implementación de sistemas de inteligencia de negocios para su análisis.
Cuidado del medio ambiente. La reducción del
impacto climático ya no es algo exclusivo de las grandes corporaciones y ya no
se limita a la otorgación de donativos a fundaciones, si no que ahora implica
la participación de cada empleado de la organización, como también el cambio en
los procesos, suministros y productos a fin de lograr el menor impacto posible
en el ambiente.
